La semana pasada falleció uno de los economistas más importantes del siglo XX. No fue tan conocido más allá de la academia, pero su influencia en el pensamiento económico. No exagero al decir que se trata de un economista de la talla de John Maynard Keynes o Milton Friedman.
Lucas es el padre del nuevo enfoque clásico de la macroeconomía. Su visión representaría un reto a los fundamentos de la teoría macroeconómica existente hasta el momento, dominada por el Keynesianismo. Tenía un gran estilo para escribir y era famoso por ser muy generoso, aunque muy crítico.
De hecho, su artículo más famoso de 1976, que le valió el Nobel de Economía, era precisamente una crítica a las recomendaciones que hacía la macroeconomía en la época.
La crítica de Lucas y las Expectativas racionales
El artículo se llama “Evaluación Econométrica de las políticas: una crítica”. En el, Lucas señalaba la importancia de tomar en consideración las expectativas de las personas cuando se hace política macroeconómica.
Supongamos que eres un gobernante o banco central, observas los últimos 50 años de datos microeconómicos y te das cuenta que siempre qué hay inflación alta el desempleo es bajo. A esta relación se le conoce como la curva de Phillips, y era muy popular en la época.
Una conclusión a la que podrías llegar es que podemos aprovechar esta relación entre inflación y empleo cuando se aproxima una recesión: puedes inyectar mucho dinero a la economía e ignorar el alza de precios para mantener una situación de pleno empleo.
Cómo puedes adivinar, esa sería una conclusión incorrecta, pues no toma en cuenta la racionalidad humana. Si los negocios observan que la inflación es más alta de lo que solía ser, pueden ajustarse a la “nueva normalidad”. Si la inflación solía ser 4% y sube a 6% por un periodo muy prolongado, ahora 6% se vuelve la tasa normal y el banco central tendría que subir la tasa a 8% para lograr su objetivo. Pero si 8% se vuelve la nueva normalidad, tenemos un problema.
Si esto sigue, podríamos acabar con hiperinflación o con el mismo nivel de desempleo con el que empezamos, pero con una inflación mayor. Ninguno de esos escenarios es bueno.
El problema se le conoce como expectativas racionales y su solución de acuerdo a Lucas se divide en tres pasos:
- Asumir que las personas se ajustan rápidamente a los cambios en las políticas y planear sus respuestas en base a ello.
- Los modelos de la economía se deben basar en aquello que no se puede cambiar fácilmente (como la tecnología o las normas sociales).
- Las políticas se deben diseñar con base en reglas establecidas y no de acuerdo a las decisiones de quienes las hacen. De esta manera, los economistas pueden analizar los efectos que las políticas tienen al revisar la información pasada.
Lucas no inventó estos elementos, pero fue el primero que los unificó de manera lógica y entendible. Su razonamiento fue aceptado de tal forma, que representa un antes y un después en el pensamiento macroeconómico. Toda la macroeconomía que vino después de Lucas y las expectativas racionales se volvieron la base de todos los modelos macroeconómicos, incluyendo el famoso modelo de equilibrio general dinámico estocástico (DGSE).
Lucas y el Crecimiento Económico
A pesar de que Lucas es famoso por su trabajo sobre los ciclos económicos, ese no era el tema que más le interesaba era realmente el crecimiento económico.
De acuerdo a Lucas, los bancos centrales eran ya lo suficientemente buenos en la tarea de estabilizar la economía cuando los daños de una recesión eran lo suficientemente pequeños para no importar.
Lucas hizo otras contribuciones también muy interesantes a la teoría de la empresa, con modelos que asigna recursos a las empresas an función de las habilidades que sus administradores tienen en el manejo de la empresa. El siguiente hilo de Twitter lo explica mejor.
We have seen much about Bob Lucas' macro contributions these days, but he also had a highly influential contribution to the theory of the firm: the "assigment theory of the firm", which explains, for instance, why Musk earns so much (and controls so many resources).
— Luis Garicano 🇪🇺🇺🇦 (@lugaricano) May 22, 2023
THREAD pic.twitter.com/l9m5VWBYol
Sin duda, Lucas fue un personaje notable y su contribución a la economía es innegable. Las lecciones que nos dejó viven aún en nuestros salones de clase en las clases de macroeconomía.